martes, 23 de noviembre de 2021

2020

 Puedo decir quizás por las pocas veces que te acercaste a preguntar cómo iba todo, y yo haciendo lo que podía con lo que ése lugar hacía de mi, te respondía cortante y te ibas, o por aquella vez que tuve un desencuentro con un compañero delante tuyo y se lo conté a mi psicóloga y me dijo "un machito haciéndose el machito delante de otro machito"  pero yo había tirado una carpeta con desprecio e impotencia y te vos reíste, así que simplemente era un machito haciéndose el machito , por eso cuando te vuelvo a cruzar te dedico mi mejor sonrisa  y un ¡Hola! y me corrés el arco porque vas a 100 y respondes sin mirarme y apático: hola 

Podría lograr rescatar poquitos  momentos más, como cuando alguien te menciona al pasar como un buen tipo o cuando te escucho sin querer hablar de lo que te gusta. Pero no, tengo registrado el momento en que reparo en vos: nueva breve interacción, yo estresada te pido algo y lo pido de tal forma que suena a orden o como pidiendo algo obvio y me respondes con serenidad "bueno" y yo me voy apurada pero me doy vuelta y estás apoyado en la pared  y no recuerdo si mirás el celular o te mirás las zapatillas, abstraído del lugar, la situación, y pienso que te ves bonito así ignorando todo,  contrastando con el escenario, ese pensamiento me dura tres segundos porque vuelvo al caos. Cuando me fui decidí que quería llevarme todo lo que me pareció diferente y bueno y ahí apareces otra vez, breve, inconcluso y casi anónimo. Escribo esto para que lo sepas y no para  obtener lo mismo de tu parte, de todas formas tampoco podrías hacerlo. Pero me parece lindo que cuando uno ve algo único o noble en el otro pueda hacérselo saber. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario